Como cada
año, algunos amigos nos tomamos, frente a la Cachucha, una cervecita con el
viejo profesor Paco, que suele repetirnos: “A mi edad ya no estoy para
tonterías”. Nos contó cómo le va por ahí y conversamos con la libertad que
dan los años y la amistad.
Le preguntamos cómo había encontrado el
pueblo.
-Pues
más o menos como el año pasado, contestó. Puerto Real es un pueblo
tranquilo que camina solo, a veces se maltrata solo y también se ayuda y se
cura solo. O eso parece. Por otra parte, veo las actividades propias de verano que supongo ya estarían
programadas por el anterior gobierno.
Por cierto, he notado que el actual
gobierno municipal, aunque haga lo mismo, utiliza
mucho más la publicidad. Todos los días salen en los medios locales.
Incluso anuncian varias veces la misma actividad tal vez para crear la
sensación de que hacen muchísimas cosas: Hasta cuatro veces un concejal apareció
en los medios anunciando la chistorrada, la misma chistorrada.
Sucede algo parecido con el 'nuevo’ Plan de
limpieza: Vistieron con monos llamativos a los chicos y chicas del Plan de
empleo de la Junta y los repartieron por toda la ciudad. Van en grupos y pasan
varias veces por los mismos lugares para dar la impresión de más limpieza. A
ello se suman los anuncios del Ayuntamiento en los medios indicando que el Plan
llega al barrio Casines, o al Río San Pedro, o al Marquesado… En realidad es un
Plan de limpieza, aunque parezcan diez. Por
eso dicen que la publicidad es el alma de la política.
Paco contó una anécdota acerca del tema de
la limpieza. Por lo visto alguien le comentó: - ¿Tú sabes cuánto vale la limpieza de un pueblo? Pues, depende del
civismo de sus habitantes. Hay pueblos en los que por mucho que limpies sigue
habiendo zonas sucias, porque hay mucho ciudadano guarro. Y tenía sentido
lo que decía aquel hombre. ¿Por qué hay gente tan sucia? ¿Serán así en su casa?
¿O sólo en la calle, porque la calle es de todos y no es de nadie…? Lo gracioso
del caso es que la limpieza se paga con dinero público, es decir con dinero de
todos, de los ciudadanos limpios y de los descuidados.
Pudimos advertir que el profe Paco no tenía muchas ganas de hablar de política.
Dice que está harto de tanto cuento. Harto de tantos gobernantes corruptos que
se están burlando de todos, a costa de los votos recibidos. Ahí nos tienen
entretenidos, meses y meses, con su serie “Juego
de Partidos”, bochornoso espectáculo de pactos de las derechas y de peleas
entre las izquierdas. Y ahora hablan de otras posibles Elecciones como si eso fuera
la mayor desgracia social. ¿Qué desgracia es volver a votar…? Lo grave es que
la gente no aprendemos y volvemos a votar a los mismos que nos toman el pelo,
que nos engañan una y otra vez, que dicen pero no buscan soluciones, que miran por
sus intereses personales y partidistas más que por el interés general. Y así
estamos, que en lugar de que los políticos se preocupen por los
problemas de la sociedad, es la sociedad la que está preocupada por los
problemas de los políticos.
Recuerdo también cuando en
junio del año pasado decía el PSOE de Puerto Real que Maribel Peinado debía
dimitir por ´higiene de la vida política’
y le pedían que ‘actúe en consecuencia y
con responsabilidad’. ¿Lo recuerdan? Y, después, ¿con quiénes se han aliado
los del PSOE para formar gobierno en Puerto Real? ¡Menuda higiene de la vida
política! Y argumentan con un término muy de moda: “por la estabilidad de
gobierno”. ¿Estabilidad de gobierno en un municipio como Puerto Real…? Vaya
broma. Después nos dijeron que es normal que dimitan dos de sus concejales
socialistas precisamente por ese pacto con los andalucistas. ¿Dos dimisiones en
un mes de gobierno es normal…? ¡Venga ya!
Mejor cambiamos de
tema, dijo. Y así hicimos.
