PÁGINA INFORMATIVA

martes, 25 de abril de 2017

Contra la violencia machista

Un día 25 de noviembre de 1960 fueron asesinadas tres dominicanas, las hermanas Mirabal, por orden del dictador Rafael Leónidas Trujillo. Desde entonces, Latinoamérica conmemora cada 25 de noviembre el día contra la violencia de género. La ONU se sumó a la jornada reivindicativa y declaró esa fecha como Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

Cada día 25 de todos los meses, un grupo de personas, más o menos reducido, se concentra en la Plaza de Jesús de Puerto Real  (Cádiz) para denunciar y condenar la violencia machista o violencia de género.
Este 25 de abril ascendía a 21 la cifra de víctimas mortales durante este año. Mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas. De ellas, sólo 4 habían presentado denuncia con anterioridad. Lo que hace pensar si realmente se conocen los recursos existentes aunque sean deficitarios, si las víctimas conocen realmente sus derechos, si sus entornos familiares las apoyan, si amistades y vecindario no miramos hacia otro lado.
¡Tanta alarma y drásticas medidas contra el terrorismo político y, a la vez, tan escasa atención y débiles medidas contra el terrorismo machista! Por algo será…

 Antes del minuto de silencio, resonó por los rincones de la plaza un Comunicado de la Asociación de hombres por la igualdad de género (AHIGE) leído sentidamente por el actor Pepo Oliva, residente en este municipio:
        "…La violencia de género es una escandalosa realidad que cada día se extiende más y afecta a toda la sociedad. Es la evidencia diaria de nuestras contradicciones y una exigencia inmediata para reflexionar sobre los problemas que están en su origen.
        Sus consecuencias son terribles; miles, cientos de miles de mujeres viven atemorizadas ante una continua situación de terror físico y psicológico en sus hogares y entorno inmediato.
        Sorprendentemente, los causantes de este mal, no son hombres extraños a las víctimas. Son sus propios maridos, novios o parejas quienes maltratan… Hombres comunes, ciudadanos típicos, en muchos casos modélico, amables, reconocidos y, a menudo, respetuosos y cordiales en su trabajo...Hombres que no están siendo capaces de reconvertirse hacia un tipo de relaciones igualitarias, basadas en el respeto mutuo…
        Los agresores no son mayoría… Pero, ¿y el resto? ¿Dónde estamos y qué hacemos el resto de los hombres? La violencia es posible porque el resto de los hombres mantenemos algún tipo de complicidad y cierta tolerancia hacia ella. Ya sea por miedo, por egoísmo, por rencor o por una malentendida solidaridad masculina, lo cierto es que muchos de nosotros no hacemos lo suficiente para acabar con la violencia de género, sencillamente no hacemos nada...
       ¿Te has parado a pensar si puedes hacer algo más, de lo que haces, para luchar contra la violencia de género?  Esta es la pregunta que lanzamos a los hombres. La mayoría, hasta ahora, nos hemos limitado a contemplar desde la distancia este gravísimo problema, sintiéndonos libres de culpa y pensando que bastaba con no ser nosotros los maltratadores. Pero eso no es suficiente, pues EL SILENCIO NOS HACE CÓMPLICES…
        Hacemos desde aquí una petición a todos los hombres: No miréis para otro lado, no sigáis tolerando en vuestro entorno ninguna situación de violencia, sexismo o discriminación hacia las mujeres. Es  nuestra responsabilidad actuar allí donde se dé o se prepare el horror. Denunciad aquellos casos que conozcáis y apoyad, sin ninguna duda, a las víctimas, pues necesitarán de toda nuestra solidaridad. Hacedlo por ellas y por nosotros…

 PUERTO REAL actualidad


domingo, 16 de abril de 2017

Ver, oír y callar


‘Esa es mi norma de vida’, dice el amigo Luis. Al parecer, su actitud de ‘ver, oír y callar’ le evita muchas complicaciones.
Y el caso es que Luis tiene ideas muy claras sobre lo que sucede en su entorno y sabe explicarlas perfectamente. Con gran sutileza nos describió la realidad de su pueblo, Puerto Real.

Cuenta Luis cómo en su pueblo todo anda un poquito mezclado: Con igual entusiasmo se vive la cabalgata del humor del carnaval que las procesiones de Semana Santa, o al mes siguiente se baila en las casetas de feria.
Jóvenes, que apenas pisan la iglesia en todo el año, van vestidos de penitentes o cargando imágenes en Semana Santa.
Padres no creyentes y nada practicantes que se enfadan si sus niños no son incluidos para catequesis de primera comunión.
Chicas, que no se manifiestan contra los crímenes machistas, se ven reclamando con ardor los concursos de Damas y Reina de Ferias (concursos cada vez más desacreditados en muchas partes, por mucho que se tilden de tradicionales).
Con pancartas y aplausos, numerosos vecinos y vecinas recibieron en la plaza de Jesús al concursante “el Pitu”, mientras es exiguo el respaldo a otras importantes causas y actos públicos (los 'círculos del silencio' por los inmigrantes y refugiados fallecidos; las concentraciones mensuales contra la violencia de género; las jornadas sobre memoria histórica y exhumación de restos de personas asesinadas por el franquismo; las rendiciones públicas de cuentas cada trimestre por parte del gobierno municipal)… Todo anda muy revuelto.

Cuenta Luis cómo en Puerto Real sobran razones para no fiarse de los políticos: ¿Cuántos políticos nos han  engañado, creando falsas esperanzas con su publicidad de planes para Delphi y de nuevas cargas de trabajo para Navantia? 
¿Cuántos años llevan tomándonos el pelo con el polígono de las Aletas, y formaron un Consorcio y un Consejo Rector que ha estado chupando del bote, y ahora dice el Tribunal Supremo que no es viable?
¿Cuántos políticos han pasado por nuestro Ayuntamiento que se han vuelto ‘vividores’ de la política, que van saltando de un partido a otro con tal de asegurarse su futuro personal, aunque aparenten estar muy preocupados por los intereses del pueblo?
¿Habrán grabado los vecinos del Río San Pedro las buenas y huecas palabras de todos los representantes políticos que han desfilado por el barrio para interesarse por el tema del cambio de cableado eléctrico, que con tanto tesón viene reivindicando el vecindario?
¿Cómo puede ser que, tras múltiples estudios minuciosos y concienzudos, se adjudicara la construcción del segundo puente de Cádiz por 273 millones de euros y ha terminado costando a las arcas públicas 484 millones?...

Efectivamente, Luis tiene sus opiniones particulares y sus explicaciones sobre lo que sucede en su pueblo. Pero él sigue prefiriendo ‘hacer la vista gorda’ y callarse porque así se libra de muchos problemas. Seguramente no le gustará que publiquemos estos comentarios, le pediremos disculpas, pero igual que han servido para hacernos reflexionar, también pueden servir a otras personas.

PUERTO REAL actualidad


martes, 11 de abril de 2017

Nos dijeron

Nos dijeron que la actualidad está en la prensa y resulta que está en la gente.  
Nos pusimos a mirar los medios informativos y dejamos de mirar a la población.
Después  nos acusaron de ingenuos…

Nos dijeron que la cultura está en los libros y resulta que está en el esfuerzo de la gente por dar respuestas a su vida y a su entorno.
Nos pusimos a venerar a los titulados y nos olvidamos de los luchadores.
Después  nos acusaron de tontos…

Nos dijeron que la ética está en la religión y resulta que está en la conciencia.
Nos pusimos a rezar y dejamos de comprometernos.
Después  nos acusaron de hipócritas…

Nos dijeron que el progreso está en la riqueza y el consumo, y resulta que está en la práctica de los derechos humanos.
Nos pusimos a acumular y derrochar a costa de los más pobres y de la naturaleza.
Después nos acusaron de criminales…

Nos dijeron que la democracia está en votar en las elecciones y resulta que está en la participación activa.
Nos dejamos llevar por los representantes políticos, y éstos abusaron, se corrompieron, nos engañaron  y nos burlaron.
Después nos acusaron de imbéciles…

Nos dijeron que el miedo es un mecanismo natural de defensa del ser vivo y resulta que es un veneno paralizante.
Nos creímos las amenazas de los dirigentes tiranos y terminamos sometiendo  nuestros deseos a la voluntad ajena y justificando la obediencia debida.
Después nos acusaron de serviles e impotentes…

Nos dijeron que lo moderno está en seguir los valores del Mercado, porque mejora nuestra imagen, más joven, más actual, más bella,…y resulta que lo avanzado sigue estando en el respeto a los valores humanos y sociales.
Nos apuntamos a gimnasios, proliferaron la ropa de ‘marca’ y de moda, los botox y arreglos cirujanos, la juventud de ‘bote’, la importancia de ‘tarro’…
Después nos acusaron de estar haciendo el payaso y de ‘monas vestidas de seda’…

Nos dijeron que hacer política es afiliarse a un partido y resulta que es luchar por los derechos del pueblo.
Nos hicimos militantes defensores de la ideología e intereses de un partido político y nos fuimos distanciando de los problemas e intereses de nuestra vecindad.
Después nos acusaron de politiqueros y oportunistas…

Nos dijeron, nos dijeron… Y lo que es peor, nos lo siguen diciendo.