PÁGINA INFORMATIVA

lunes, 20 de noviembre de 2017

Proyectos frente a sueños

El pasado viernes, 17 de noviembre, tuvo lugar en Puerto Real la Presentación del Proyecto “Las Aletas: Alternativa Real y Sostenible”. Un proyecto fruto de un largo trabajo en comisión por parte de numerosas organizaciones y expertos (ingenieros y técnicos, colectivos ecologistas, sindicatos, asociaciones cívicas de afectados  por el desempleo, la Mesa por el Empleo de Cádiz, asociación Federal para Fomento de la Economía del Bien Común, asociación Bahía de Cádiz, asociación para Mediación Social EQUA, el ayuntamiento de Puerto Real, etc.).
Quienes presentaron el Proyecto lo hicieron en términos muy positivos y efusivos, algunos rozando el mitin y la soflama. Pero lo cierto y verdad es que es el único proyecto que se conoce después de la última Sentencia denegatoria del Tribunal Supremo (4/abril/2017).
Cada cual podrá valorarlo personalmente tras su lectura en la web de Participación Ciudadana.

Durante el acto de presentación fueron brotando diversas SENSACIONES.
Parece ser una ‘alternativa real’ frente a las propuestas estériles e inviables, que durante diez años vendieron humo e ilusión pero sólo generaron desconcierto y frustración en la población. Modelos antiguos que fracasaron, razón por la cual hay derecho a intentar otros alternativos.
Se atisba como ‘Proyecto real y sostenible’ frente a los megaproyectos ilusorios, que sólo sirven para la especulación, para el beneficio privado y para la degradación ambiental. No falta suelo industrial, lo que faltan son empresas. ¿Para qué sirve un macropolígono industrial sin empresas, o aeropuertos como en Castellón o Ciudad Real sin aviones, o la Ciudad de la Luz de Alicante sin rodajes de películas, o estaciones de AVE que utilizan apenas 10 personas, etc.? ¡Cuántos millones dilapidados para engordar los bolsillos de unas cuantas empresas y de unos pocos comisionistas!
Se atisba como un proyecto ‘nuestro’, que tiene en cuenta nuestro terreno litoral, nuestro entorno y riqueza natural, nuestra historia, nuestros recursos, nuestro paisaje vital, nuestro patrimonio comunal, nuestra cultura y conocimientos, nuestras capacidades.
Se ve como un proyecto ‘para nosotros’, para ser más autónomos y dueños de nuestro destino y menos dependientes de grandes multinacionales que sólo miran por sus negocios. Y poder producir energías renovables que aumenten nuestra soberanía, y responder a las necesidades de nuestras gentes, y generar trabajo estable y sostenible respetando nuestro medio natural.
Aparece como un proyecto ‘participativo’, porque es mucha y muy diversa la gente que está trabajando en él, son muchas las ideas que se recogen y es  transparente, al contrario de antiguos proyectos secretos elaborados según dictados políticos por élites institucionales y partidistas.
Da sensación de proyecto ‘ilusionante´, porque contamos con un patrimonio milenario natural y maravilloso, que puede convertirse en la principal fuente de riqueza en el futuro, que encierra muchísimas posibilidades de producción (esteros, fangos, talleres, acuicultura, turismo y visitas culturales, producción de energías renovables, salinas, etc.). Y todo de forma real y sostenible.

Los partidos de la oposición, ausentes por cierto en ese acto de presentación, ya rechazaron en Pleno municipal una moción sobre este proyecto en mayo/2017. Al parecer, prefieren seguir vendiendo humo con proyectos del pasado: “Iba a ser la panacea para la Bahía de Cádiz, se crearían 18.000 puestos de trabajo mágicamente, las Aletas se convertiría en la tercera joya de la corona de la Junta, un polígono con innumerables posibilidades, de vital importancia para el auge económico y social de nuestro pueblo,…”, son frases textuales. Vendieron aire, fantasía, ficción, a la vez que imagen partidista. 
Esa es la cuestión: Hablamos de proyectos reales frente a sueños y quimeras. Y sólo es posible la  reivindicación con proyectos reales en la mano, no con sueños.
La realidad desmiente: Durante diez años nos han vendido el sueño de Las Aletas. No existe. Se iban a crear miles de empleos, pero el único empleo creado son los 150.000 euros anuales que se están chupando los políticos del consorcio de las Aletas. Hay motivos para pensar que varios dirigentes antepusieron su imagen partidista  y la captación de votos a los intereses del pueblo.
Los 100 millones actuales en la caja del Consorcio brillan como la estrella de un belén. ¿No es un auténtico despropósito  ese dinero ocioso en esta zona que padece tanto desempleo y tanta exclusión social? Hasta se habla de riesgo de que los 100 millones puedan volar a otra parte.
Pues bien, frente a las distintas tramas políticas se quiere defender este Proyecto de las Aletas,  como alternativa real y sostenible.
Pero mejor que la presentación es el Proyecto. Un trabajo concienzudo de 250 páginas, que se puede leer en la web de Participación Ciudadana del Ayuntamiento.

PUERTO REAL actualidad


jueves, 2 de noviembre de 2017

Preocupaciones

¡Qué trajín! Cualquiera que llegara en estos tiempos a España se quedaría boquiabierto. 
Vaya semanitas que llevamos con el tema de Cataluña. La prensa, la radio, la televisión, las redes sociales… Opiniones para todos los gustos, reacciones, enfrentamientos, banderas al aire, chistes, movimientos de empresas, contradicciones (lo que quieran, pero al Barsa no me lo toquen). Curioso el ser humano, ¿verdad?
¿Y los políticos? Con sus insensatos juegos de palabras amasando confusión. Unos y otros manoseando vergonzosamente los mismos conceptos de democracia, represión, dictadura, libertad y justicia. Inútiles para ejercer la política con dignidad y, sin embargo, capaces de generar falsas ilusiones, temores, frustraciones, sufrimientos y preocupaciones a la ciudadanía. ¡Horroroso espectáculo del disparate!
Almudena Grandes comentaba: Nos hallamos a merced de dos gobiernos muy semejantes, separados por una diferencia fundamental. El que preside Rajoy es nefasto, autoritario, encubridor de sus propias corrupciones y profesional. El que preside Puigdemont es nefasto, autoritario, encubridor de sus propias corrupciones y aficionado.

Mientras tanto, un manto de silencio ha cubierto otras realidades: El hijo Pujol Ferrusola negociando con el fiscal para rebajar su condena; los tribunales detallando la trama corrupta de la Gürtel y evidenciando los amaños y Caja B del Partido Popular; pateras de inmigrantes llegando en masa a las costas andaluzas, salvo las víctimas que se tragó el mar durante la travesía; otros devueltos en caliente ilegalmente a sus países de origen; 21.000 personas muertas en 2017 esperando las prestaciones de dependencia establecidas por ley, que nunca les llegaron; 16.842 familias que perdieron su casa durante este año, con Andalucía a la cabeza (4.525 desahucios); casi un millón de accidentes laborales en 2017, entre las personas que tienen la dicha de trabajar; etc.
¿Qué lugar ocupan estas otras realidades preocupantes?  ¿A quién preocupan? Y todo esto sin salirnos de nuestro país.

Por cierto, si miramos a nuestro municipio, ¿cuáles son actualmente las preocupaciones principales en Puerto Real?
¿A quién se lo podemos preguntar? ¿A los partidos políticos, a las peñas, a las asociaciones de vecinos, a los medios de comunicación locales, a las parroquias…? ¿O mejor no les preguntamos a esos colectivos, porque no terminamos de fiarnos de sus informaciones? Pues la realidad, que se mezcla con intereses, se desfigura.
¿O cada familia tiene sus preocupaciones y punto pelota? Porque haberlas, haylas... Salud, trabajo, vivienda, situación familiar, hijos,…
La gente de Puerto Real es comunicativa y de corazón grande. Y se supone que tendrá preocupaciones personales, familiares y también a nivel colectivo. ¿O no?
Cuando discutimos en los bares, ¿es porque son temas que nos preocupan?
Dejemos, pues, la pregunta abierta. Tal vez nuestras respuestas indiquen también el nivel de nuestra conciencia ciudadana.
En todo caso, ¡qué suerte la de saber discernir y jerarquizar los males y los diversos tipos de preocupaciones!