Llegó el Covid y mandó parar. Limitó luces, fiestas, cotillones, comensales, horarios… Una verdadera ofensa para el capitalismo y su Gran Fiesta del Consumo.
Y hace que experimentemos la
soledad: nos
encierra, nos confina, nos aísla, nos prohíbe reunirnos, besarnos y abrazarnos.
Hasta nos hace pensar: ¿Salud o Fiestas? ¿Economía o
salud? ¿Consumismo o vida? ¿Libertad individual o bien común?
Ha ocasionado un contratiempo al
no dejarnos celebrar la tradicional Navidad con los seres más queridos: ¿Para celebrar qué y cómo…?
¿Con los más queridos…? ¿Y los queridos hospitalizados y aislados…?
Resulta realmente molesto que un
simple virus nos cambie el rumbo y las costumbres. Encima nos hace sentir
vulnerables y expuestos a lo imprevisible. Nos tacha de insensibles con las
personas muertas que reducimos a estadísticas. Y fastidia con su insistente
recuerdo de no ser casual, sino fruto de nuestro maltrato a la naturaleza. No
cesa de señalarnos. ¡Qué fastidio!
Para colmo, sus mensajes
satíricos: ¿Van a permitir los seres humanos que este
sufrimiento colectivo sea en vano? ¿Lo único que les preocupa es que llegue la
vacuna y poder olvidar todo esto? ¿Qué entienden por responsabilidad? ¿Qué
tontería es esa de ‘salvar la Navidad’? ¿Volver a la normalidad significa
volver a las andadas, a las mismas relaciones con la naturaleza y al mismo tipo
de sociedad perversa? ¡Allá ustedes!
Una incógnita: ¿Cómo nos felicitaremos las
navidades este año? ¿Quizás diciendo con retintín ‘felices pascuas’? ¿Seguirá
siendo nuestro mayor deseo un ‘próspero’ año nuevo?...
Nuestros mejores deseos para toda la población de Puerto Real. También para la madre Naturaleza. Porque la esperanza es lo último que se pierde. A pesar de este Covid que ha cambiado el paso a la Humanidad.
Y a
pesar de todos los pesares. ¿Recuerdan?
-Aquella tasa
consorcial de la basura atrasada desde 2016, que el equipo de gobierno
actual decía que no se iba a pagar, pues ya la estamos pagando año por año, y a
partir de 2021 comenzaremos a pagar otra nueva “Tasa Integral de Residuos”
incluida en la factura del agua.
-No iban a subir los impuestos, pero desde enero subirá la contribución (IBI).
-Prometían un plan de actuación de protección medioambiental, pero no
sabíamos que incluía la tala de tantos árboles y arrancar los setos que
sujetaban la arena en la Cachucha.
-Y al viejo proyecto de Las Aletas, fuente de tantas ilusiones y de supuesto gran futuro para la economía y puestos de
trabajo en Puerto Real, comenzaron cambiándole el nombre (‘Lógica’) y sus
objetivos, y poquito a poco se fue esfumando el proyecto y sus millones hacia
otros lares. Puerto Real ayer promotor y protagonista, hoy suplica participar
en el proyecto.
Bueno,
pues a pesar de estos y otros pesares, vayan NUESTROS MEJORES DESEOS y ojalá este maldito virus no dañe también nuestras
memorias y nuestros ánimos.
(Refer. a “Covid navideño”
publicado en Mirada Solidaria.es. Viñeta
de Eneko)