En la provincia de Cádiz, a este lado del Estrecho de Gibraltar,
damos testimonio de ello: Es mucha la
muerte sumergida por aquí.
Un testimonio en silencio para
que no quede en el silencio. Sin ánimo de ofender, ni a quien vive en otras
costas, ni a quien vive tierra adentro y desconoce cómo se las gasta el mar.
Un testimonio de amistad, porque
cosas así hay que contarlas a los amigos.
Sabiendo que esto que pasa
lleva muchos años pasando. Bien lo sabemos.
Es una vieja paradoja: Los
libres blindan las fronteras a los pobres, los justos no respetan los derechos
de asilo y de acogida, los demócratas se comportan de forma xenófoba y racista, los
dignos decretan la muerte para otros semejantes, los pudientes prefieren la
seguridad a los derechos humanos…
Una llamada: El
fotoperiodista sanroqueño Fernando
García Arévalo es conocido como “El Pateras”. Dentro del agua, junto a la
costa, retrataba un cadáver procedente de una patera de inmigrantes africanos y
junto a ese había otro cadáver flotando que las olas traían y llevaban golpeándolo
sin cesar contra las piedras. ‘Se acabó, basta de fotografías, dijo, tengo que
sacarlo’ y se puso manos a la obra. Y cuando, en aquel silencio, está sacando
al cadáver del agua, suena un teléfono móvil. Nadie había alrededor, era una
llamada desde el muerto, desde un móvil envuelto en cinta de embalar marrón sujeto
al cuello. “El Pateras” se quedó de piedra, y con la piel de gallina se
preguntaba quién le estaría llamando…
Este pasaje está incluido en
el documental que compartimos con
mucho gusto. Para quienes no quieren gastar su tiempo en estas cosas ya les
avisamos que dura una hora, aunque
les invitamos a asomarse no más. Para el resto será una suerte y una dicha
poder acercarse a una realidad humana más cercana de lo que puede parecer y
contada desde el propio tajo.
Documental: EL NAUFRAGIO, 30 años de memoria sumergida
(Refer. mirada solidaria.es, enero 2019)
Gracias por el texto. Es imprescindible que nunca nos acostumbremos a ver esta tragedia como normal e inevitable.
ResponderEliminarUn abrazo.
JACD